En la Cátedra OMC en el Caribe, Alberto Madero explicó cómo Colombia puede atraer inversión, aprovechar los aranceles a China y ganar presencia en EE. UU.
En la Cátedra OMC del Caribe, nuestro socio Alberto Madero explicó cómo el país puede atraer inversión y ganar participación en los mercados de Estados Unidos y China. Señaló que Colombia puede aprovechar las oportunidades que surgen de los altos aranceles estadounidenses a productos chinos y de la reorganización de las cadenas de suministro globales.
Del 20 al 22 de agosto de 2025, la Universidad del Norte y la Universidad de los Andes celebraron en Barranquilla la Cátedra OMC en el Caribe, un evento académico que conmemoró los 30 años de la Organización Mundial del Comercio (OMC). Durante tres días, más de 120 participantes —entre académicos, empresarios, estudiantes y representantes del sector público— analizaron los principales retos y oportunidades del comercio internacional en un contexto de creciente proteccionismo, disrupciones logísticas y tensiones geopolíticas.
El evento concluyó con una conferencia de Alberto Madero, socio fundador de Madero Asociados y entonces decano de la Facultad de Derecho, Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad del Norte. En su presentación, titulada De los riesgos a las oportunidades: Colombia frente al proteccionismo de EE. UU. y su guerra comercial con China, Madero describió cómo el auge del proteccionismo en Estados Unidos, la guerra comercial con China y la parálisis de los mecanismos de resolución de controversias de la OMC configuran un escenario de riesgos, pero también de oportunidades estratégicas para Colombia.
Madero resaltó que la reconfiguración de las cadenas de suministro globales abre una ventana de oportunidad sin precedentes para Colombia. De acuerdo con estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la consolidación del país como centro regional de nearshoring podría aumentar las exportaciones en más de USD 2.500 millones en sectores clave como la agroindustria, los servicios de BPO —tercerización de procesos de negocios— de y la manufactura ligera, principalmente con destino a Estados Unidos.
El fenómeno del nearshoring —la relocalización de operaciones productivas a países cercanos a los grandes mercados de consumo— cobra especial relevancia ante el auge del proteccionismo de EE.UU. y las tensiones en estrechos estratégicos como Suez, Ormuz o Panamá, que encarecen el transporte marítimo y favorecen cadenas de suministro más cortas y resilientes. La posición geográfica privilegiada de Colombia, con salida a dos océanos y acceso directo al Canal de Panamá, le otorga ventajas para convertirse en hub logístico regional y atraer inversión en sectores de alto valor agregado.
En su intervención, Madero explicó que los altos aranceles de Estados Unidos a productos chinos y de otros países —que han alcanzado picos de hasta 45 % en algunos sectores y un promedio efectivo cercano al 15,8 %— generan una oportunidad para las exportaciones colombianas. Productos como café, frutas, flores, alimentos procesados y otros productos agroindustriales pueden ganar competitividad en el mercado estadounidense, donde compiten con bienes gravados con tarifas más altas.
Pero las oportunidades no se limitan a Estados Unidos. “En un escenario de tensiones geopolíticas, Colombia debe identificar nichos estratégicos para atraer inversión a Colombia. Al mismo tiempo, puede posicionarse como proveedor clave en China, por ejemplo en agroindustria, plásticos y alimentos, porque ese país está reorganizando sus cadenas de suministro”, afirmó Madero.
La reorganización de las cadenas chinas, motivada por la guerra comercial con Washington, crea una demanda creciente de proveedores confiables para insumos agrícolas, industriales y de alimentos, en la que Colombia —ya con avances en exportaciones de café, aguacate y carne bovina— puede fortalecer su presencia.
Madero enfatizó que aprovechar este momento exige acciones coordinadas entre el sector público y privado. Entre las prioridades identificó:
Asimismo, recomendó mapear la canasta exportadora expuesta a aranceles, ajustar contratos e Incoterms para distribuir el riesgo del incremento de tarifas entre vendedores y compradores, cuando sea posible, y diversificar mercados para reducir la dependencia de Estados Unidos.
“El reto es convertir la incertidumbre en ventaja estratégica. Colombia tiene un gran potencial para exportar y atraer inversión; ahora debe impulsar, con visión y disciplina, iniciativas públicas y empresariales que lo hagan realidad”, concluyó Madero.
Con experiencia en arbitraje y comercio internacional, y como negociador de tratados de libre comercio de Colombia, Alberto Madero ha asesorado a empresas, asociaciones y gobiernos en procesos de internacionalización. Su trabajo abarca la estructuración legal de inversiones, el aprovechamiento de acuerdos comerciales y la defensa de intereses en foros multilaterales como la OMC.
La Cátedra OMC en el Caribe, impulsada por Alberto Madero durante su período como decano en la Universidad del Norte, se ha consolidado como un espacio clave de estudio del comercio internacional en Colombia y América Latina. Este evento posiciona a la Universidad del Norte y a nuestro socio como referentes en el análisis de los desafíos del comercio global y la búsqueda de oportunidades para Colombia en la economía mundial.